"La gente esta cabreada". Con esas palabras el alcalde de Chile Chico, Luperciano Muñoz, justificó la eliminación de la ordenanza municipal que instruía el uso obligatorio de la mascarilla en espacios públicos de la comuna.
La decisión fue tomada de forma unánime por el Concejo Municipal y si bien desde el municipio asumen que las normas sanitarias por la pandemia siguen vigentes, explicaron que poner fin a la ordenanza es una decisión autónoma de la comuna. "Esta ordenanza lo único que hacía era meterle la mano al bolsillo de la gente, porque Carabineros fiscalizaba en base a esta ordenanza y sacaba partes. Cincuenta mil pesos. Hay gente a la que le han sacado hasta 20 partes por la mascarilla" dijo el alcalde.
Sin embargo, la seremi de salud de la región de Aysén recordaron que a pesar del fin de esta ordenanza municipal, el uso de la mascarilla sigue siendo obligatorio en todo el territorio nacional y quien lo fiscaliza es la autoridad sanitaria correspondiente.